La ONU votará hoy sobre los asentamientos israelíes
pese a las presiones de Trump
Netanyahu recurrió
al presidente electo para que Egipto retirara la propuesta pero cuatro países
vuelven a plantearla
JUAN CARLOS SANZ
internacionalelpaís.com
Jerusalén 23 DIC 2016 –
Cuatro países –Nueva Zelanda, Venezuela,
Malasia y Senegal– han vuelto a plantear ante el Consejo de Seguridad de la ONU
una resolución de condena a los asentamientos judíos en territorios ocupados palestinos después de que
Egipto la retirara tras las presiones del presidente electo de Estados Unidos,
Donald Trump a petición de Israel. El inicio del debate previo a la votación de
la resolución está previsto este viernes a las 15.00, hora de la costa este
norteamericana (las 20.00 GMT, 21.00 hora peninsular española). El borrador de
la iniciativa establece que “los asentamientos israelíes en territorios
palestinos, incluido Jerusalén Este, no tienen validez legal” (…) “y su
actividad debe cesar inmediatamente". Fuentes del Gobierno de Israel
aseguraron que si se confirma, como parece probable, que la Administración del
presidente Barack Obama no ejerce el derecho de veto y permite la aprobación
del texto, ello supondrá un "abandono" del Estado judío por parte de
Washington.
Trump parecía haber reforzado con sus
gestiones la relación entre Estados Unidos e Israel tras ocho años de
desavenencias entre Obama y el primer ministro Benjamín Netanyahu. Cuatro
semanas antes de tomar posesión del cargo, el presidente electo republicano había subido el
jueves por primera vez a la escena internacional para pedir al mandatario
demócrata que vetase la propuesta de resolución contra los asentamientos ante
el Consejo de Seguridad. Pocas horas antes de que se sometiera a votación en la
tarde del jueves la iniciativa original de El Cairo, Trump telefoneó al
presidente egipcio, Abdelfatá al Sisi, quien poco
después ordenó la retirada del texto “para efectuar nuevas consultas”, lo que
forzó un aplazamiento indefinido de la sesión.
La Administración del presidente Obama ha
defendido la solución de los dos Estados y se ha opuesto a la expansión de las colonias. La Casa Blanca
impulsó negociaciones de paz entre israelíes y palestinos a partir de 2012,
pero el diálogo directo entre ambas partes permanece roto desde 2014. Un alto
responsable del Gobierno israelí dijo a Reuters que sospechaba que el actual
Gobierno de Estados Unidos había actuado de forma coordinada con los palestinos
para organizar una “emboscada vergonzosa” en el Consejo de Seguridad de
espaldas a Israel que "daría alas al terrorismo y al boicoteo". “Ha
sido una violación del compromiso básico (de EE UU) de proteger a Israel en la
ONU, que rompe con décadas de una política constante y socava las perspectivas
para poder trabajar con la próxima Administración en la consecución de la paz”,
agregó la misma fuente.
"Pedimos a Estados Unidos que permanezca junto a
nosotros. Esperamos que nuestro mayor aliado mantenga su política y vete esta
resolución", ha dicho el embajador israelí ante la ONU, Dany Danon, a
través de Twitter. El diplomático ha asegurado que se trata de un texto
elaborado por los palestinos para "dañar a Israel".
El próximo inquilino de la Casa Blanca no había actuado
por cuenta propia ante El Cairo, según fuentes israelíes, sino a petición del
primer ministro israelí. Netanyahu temía que la Administración Obama se negara
esta vez a ejercer su derecho de veto —como hizo en 2011 ante un debate similar
en la ONU— y se limitara a abstenerse. Cuando el Gobierno israelí tomó
conciencia tras repetidos silencios de la Casa Blanca y del Departamento de
Estado de que el veto no iba a ser la
opción adoptada por EE UU en el Consejo de Seguridad, sus representantes diplomáticos
entraron en contacto con “el más alto nivel” del equipo de transición de Trump
para pedirle que interviniera.
El resultado de la inusual gestión de un presidente electo
no se hizo esperar. La Presidencia egipcia ha reconocido este viernes que Al Sisi
recibió una llamada del nuevo mandatario de EE UU. "La llamada telefónica
afectó al proyecto de resolución ante el Consejo de Seguridad de las Naciones
Unidas sobre los asentamientos israelíes", puntualizaba un comunicado
oficial en El Cairo. "Los dos líderes coincidieron en la importancia de
darle a la nueva Administración (estadounidense) la oportunidad de tratar de
manera exhaustiva todos los aspectos de la causa palestina para lograr un
arreglo integral", añadía la nota de la Presidencia.
Como copatrocinadores de la propuesta de resolución, Nueva
Zelanda, Venezuela, Malasia y Senegal la recuperaron este viernes después de
que Egipto la retirara definitivamente. El texto que se someterá a
votación mantiene la petición del Consejo de Seguridad de la ONU para que
Israel detenga la actividad y la expansión de los asentamientos y advierte de
que la comunidad internacional no reconocerá ninguna alteración de las
fronteras establecidas antes de la guerra de 1967 si no hay un acuerdo previo entre las
partes. En caso de salir adelante, la resolución puede abrir la vía a la
imposición de sanciones internacionales a Israel. Unos 600.000 colonos se han
instalado desde hace casi medio siglo en la parte oriental de la Ciudad Santa,
anexionada por el Estado judío, y en más de dos centenares de colonias
repartidas a lo largo de Cisjordania. Tras los Acuerdos de Oslo de 1993, el
Ejército de Israel ejerce el control pleno sobre el 60% de territorio
cisjordano e interviene alegando razones de seguridad en el resto; mantiene
además un bloqueo terrestre y naval sobre la Franja de Gaza, de donde se retiró
hace una década. Trump está considerado como más favorable a Israel que Obama
después de había prometido durante la campaña electoral que ordenará trasladar
de Tel Aviv a Jerusalén la Embajada norteamericana, una decisión que puede
desencadenar una ola de inestabilidad en Oriente Próximo. El presidente electo
defendió sin rodeos el jueves que Washington debe usar su veto para bloquear la
propuesta contra los asentamientos. "La resolución que se está
considerando en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas con respecto a Israel
debería ser vetada", dijo a través de Twitter. De
ser aprobada, argumentó más tarde en un comunicado, "situaría a Israel en
una posición muy débil para negociar (…) La paz entre israelíes y palestinos
solo llegará a través de un acuerdo negociado por ambas partes y no por las
imposiciones de Naciones Unidas”.
El presidente Al Sisi, quien expresó su admiración por
Trump durante la campaña electoral, intenta reforzar su relación con Estados
Unidos, que ofrece a Egipto una ayuda militar anual de 1.300 millones de
dólares desde hace casi cuatro décadas, la segunda más elevada después de la
que recibe Israel. Egipto se ha ido alejando de sus tradicionales aliados
árabes suníes a causa de su posición favorable al presidente Bachar el Asad en
el conflicto de Siria, y ha perdido gran parte
del generoso apoyo financiero que
le ofrecían Arabia Saudí y las monarquías del Golfo tras el golpe de Estado de
2013 en el que derrocó al presidente islamista Mohamed Morsi.
Altos cargos del gabinete del primer ministro israelí
hablaron el jueves también con dirigentes egipcios, aunque no hubo confirmación
de que Netanyahu conversara telefónicamente con El Sisi, con quien mantiene una
fluida y estrecha relación. La cooperación antiterrorista entre ambos se ha
incrementado hasta niveles no conocidos antes a causa de la amenaza que
representa la presencia de grupos afines al Estado Islámico en la frontera
común en la península del Sinaí.
Netanyahu canceló el jueves su agenda oficial tras verse
sorprendido por el anuncio de una votación en el Consejo de Seguridad. El
primer ministro israelí ya había expresado en reiteradas ocasiones su temor a
que Obama pudiese dejar de vetar una resolución de condena a las colonias tras
las elecciones del pasado noviembre, que dieron la victoria al republicano
Trump, pero no esperaba que se fuera a producir de forma inmediata.
No hay comentarios:
Publicar un comentario